¿Qué lecciones deja el covid-19 a las firmas de abogados colombianas?

Aunque continuamos en la incertidumbre sobre los efectos que tendrá la pandemia de covid-19 en la salud, los negocios y, en general, en la sociedad colombiana, es momento de preguntarse cuáles lecciones va dejando esta situación en las firmas y en los abogados.

Un elemento central es que el desarrollo tecnológico que venía impulsando la transformación digital en las firmas y exigía nuevas habilidades a los abogados tendrá mayor intensidad.

A lo anterior se suma que el confinamiento ha obligado a muchas compañías a incorporar dentro de sus alternativas el trabajo en casa y el teletrabajo, un cambio central en la idea de que la productividad se mide por el tiempo que el colaborador pasa en la oficina.

En un contexto de estrechez económica como el que se avecina, señala un informe publicado por El País, de España, los abogados deberán enfrentar tres desafíos:

1. Poner en el centro al cliente. No será suficiente vender servicios legales, sino que será necesario entregar la mejor experiencia de satisfacción al cliente. “Los innovadores exitosos serán aquellos que puedan crear un mejor ajuste del mercado legal entre los servicios que ofrecen y lo que los consumidores quieren”.
2.  Incorporar tecnología. No se trata solo de hablar de legaltech (la tecnología al servicio del Derecho), sino de invertir en herramientas tecnológicas que permitan hacer del teletrabajo una práctica habitual, prescindiendo de los espacios físicos, pero buscando estar más cerca de los clientes.
3. La importancia de las personas. El escrito indica como una gran lección la preocupación y ocupación de las firmas por sus colaboradores, incluida su salud física y síquica, en la medida de construir relaciones más horizontales, donde prime el trabajo colaborativo y los beneficios se repartan en base al trabajo, méritos y esfuerzo.

Ámbito Jurídico consultó a algunas firmas colombianas para que, desde su óptica, nos cuenten las enseñanzas que el covid-19 va dejando.

1. ¿Qué desafíos dejará la crisis económica derivada de la propagación del covid-19?

El principal desafío es entender las nuevas necesidades de los clientes y responder a ellas con servicios y soluciones que combinen talento humano e innovación tecnológica. Por otra parte, muchas firmas tendrán que replantear su modelo de negocio para sobrevivir o para captar nuevos clientes en industrias a las que antes no apuntaban. Por último, las firmas medianas que no tienen el músculo financiero ni los grandes nombres de las Big Four, ni una estructura de costos liviana como las firmas boutique serán las más exigidas en ese replanteamiento estratégico.

Juan Martín Fierro

Socio de Gericó Associates y consultor de firmas de abogados en marketing, comunicación estratégica y desarrollo de negocio

La capacidad de reinventarse y el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC). Si existe algo en lo que hoy están de acuerdo jueces, litigantes, docentes, asesores y servidores públicos que ejercen el Derecho es que las TIC se han constituido en la mejor herramienta. La pandemia ha impuesto cambios no solo en nuestras vidas familiares, sino también en la forma en que trabajamos y cómo lo hacemos. El abogado que actualmente no utilice y le saque provecho a la tecnología corre el riesgo de quedar aislado y creo que hasta impedido para ejercer su profesión. Si se es docente, las clases se dictan por medios virtuales; si se es litigante o asesor, es necesario dar uso al teléfono celular o medios virtuales. Lo mismo si se es funcionario o juez. Las TIC son un asunto transversal.

Mauricio Rodríguez Tamayo

Socio de Rodríguez Castaño Abogados

2. ¿Es necesaria una reflexión sobre el ejercicio del abogado luego de esta coyuntura?

Sin duda. Constantemente deberíamos reflexionar acerca del ejercicio profesional del abogado en la sociedad. Lo que ha sucedido no tiene precedentes y en este momento se nos exige aproximarnos a los problemas jurídicos que se van presentando no solo con creatividad, sino con humanidad. Las consecuencias de esta emergencia sanitaria ya son de gran magnitud y seguramente los próximos dos años van a ser complejos para toda la sociedad, por lo que debemos pensar en cómo contribuir a salir de la crisis siempre dentro del marco de la ley. Los abogados seremos más aliados estratégicos de nuestros clientes que puros proveedores de servicios.

Claudia Barrero

Socia de Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría

Las crisis siempre traen oportunidades. Como sociedad y como profesionales del Derecho debemos ayudar a que el país se enrumbe consistentemente hacia uno desarrollado, apoyando reformas de fondo a la justicia, al régimen laboral, pensional y tributario. Si el país no logra tener un sistema de justicia eficiente y un aparato empresarial competitivo no seremos capaces de avanzar en la dirección correcta.

Juan Camilo Rodríguez

Socio Director | Managing Partner de CMS Rodríguez-Azuero

3. Considerando la tendencia del teletrabajo, ¿siguen siendo necesarios los espacios físicos grandes para las firmas?

No creo que las firmas necesariamente vayan a reducir sus espacios físicos como consecuencia de la pandemia, pero sí es probable que dejen de crecer a la velocidad que lo venían haciendo. Es factible que se inicie una etapa de mucha más flexibilidad laboral, en la cual una parte de los abogados trabaje en casa algunos días y se establezcan días de reuniones y programas de entrenamiento. Por lo tanto, no creo que cambie drásticamente la forma de contratar abogados. En todo caso, lo que sí es seguro es que las firmas nos adaptáremos a las necesidades de nuestros clientes, las mismas que, según su evolución, impondrán nuevas tendencias en la profesión.

Claudia Barrero

Socia de Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría

Una de las enseñanzas que deja esta pandemia es que los espacios físicos deben reestructurarse. Estoy convencido que la sede física se requiere, pero no podemos ignorar que el teletrabajo, además de ser una gran herramienta, ahorra costos de eficiencia importantes. La programación del trabajo, la responsabilidad inpidual de cada uno en sus tareas, las reuniones virtuales y los teléfonos han permitido cumplir las labores. Ahora bien, el desafío es fijar bajo qué condiciones se hace el teletrabajo.

Mauricio Rodríguez Tamayo

Socio de Rodríguez Castaño Abogados

Hemos identificado los beneficios del teletrabajo, en términos de calidad de vida para nuestros colaboradores, ahorro en tiempos de desplazamientos que se ponen al servicio del negocio y del bienestar de las personas. No obstante, también valoramos encontrarnos físicamente en nuestras instalaciones, compartir, construir una cultura de trabajo propia que por supuesto es más sencilla de asentar compartiendo en un espacio físico. Las circunstancias actuales nos han llevado al trabajo en casa, como la mejor opción para proteger a nuestra gente, nos han mostrado grandes beneficios, además del compromiso del equipo. También nos ha permitido encontrar nuevas formas de interacción con clientes como webinars, videollamadas, cursos online, entre otros. Sin embargo, nada reemplaza el contacto presencial, así que, cuando sea seguro volver a nuestras oficinas lo haremos, porque valoramos la convivencia, el colegaje y el compartir con nuestros clientes. Nuestra visión es hacer un buen balance entre trabajo en oficinas y la opción de trabajo en casa.

Andrés Godoy

Socio Gerente de Godoy Córdoba

4. ¿Qué estrategias se podrían implementar para hacer de la tecnología un aliado y lograr la mejor experiencia para los clientes?

La crisis ha detonado una especie de “paranoia” tecnológica que ha puesto a muchas firmas en una carrera desbocada hacia “lo digital” sin siquiera entender muy bien de qué trata ese asunto. Muchos despachos se han dado cuenta de que estaban pagando herramientas tecnológicas robustas, como por ejemplo Microsoft 345, que incluye Teams, Sharepoint y Azure, por citar algunas de sus funcionalidades, pero no las usaban y han tenido, por fuerza de las circunstancias, que aprender a hacerlo. En este punto, creo que ninguna estrategia de transformación tecnológica funcionará si no se logra el cambio más difícil de todos, a saber, la cultura y la mentalidad de los abogados. Entendido esto, se comprenderá también que la transformación tecnológica no es igual para todas las firmas y que la estrategia a implementar dependerá del tamaño y las necesidades de cada una.

Juan Martín Fierro

Socio de Gericó Associates y consultor de firmas de abogados en marketing, comunicación estratégica y desarrollo de negocio

Nosotros ya contábamos con la tecnología necesaria para que nuestros abogados pudieran trabajar desde casa, como servidores con acceso remoto, toda la planta de personal con equipos portátiles, entre otros. La verdadera innovación ha estado más en el contacto con los clientes. La situación actual nos llevó a activar nuestras redes sociales, abrir una amplia oferta de webinars para clientes y prospectos, identificar las mejores plataformas tecnológicas para desarrollar capacitaciones online, en tiempo real o pregrabadas y seguimos en ésa investigación y aprendizaje.

Andrés Godoy

Socio Gerente de Godoy Córdoba

La principal estrategia, sin duda, es la digitalización de la firma. Nosotros hemos invertido unas sumas considerables en la estrategia de digitalización de tal forma que la oficina está actualmente funcionando prácticamente así en su totalidad. De esta manera, nuestros tiempos de respuesta y la calidad de nuestro trabajo se ha visto mejorada considerablemente.

Gustavo Tamayo Arango

Socio de Lloreda Camacho

5. ¿Las firmas deben apostar en capacitación y la transformación digital de sus colaboradores?

En la medida en que poder trabajar remotamente es una realidad, los abogados y los colaboradores en temas de soporte no necesariamente van a estar ubicados en la misma ciudad, ni en el mismo país, incluso, con lo cual es indispensable seguir el camino hacia la transformación digital para ser más competitivos.

Juan Camilo Rodríguez

Socio Director | Managing Partner de CMS Rodríguez-Azuero

La transformación digital no se limita a temas de tecnología, lo que se requiere es un cambio profundo en la forma en que prestamos nuestros servicios. La necesidad de innovar y de adaptarnos a la nueva realidad es un gran desafío, innovar en la forma en que prestamos nuestros servicios, por ejemplo, adoptando más herramientas de colaboración virtual o hallando la forma de establecer y mantener una relación cercana con los clientes, aun virtualmente; en la forma en que contratamos el talento y en la que desarrollamos nuevos negocios, la ocupación de las oficinas e, incluso, en la forma en que cobramos nuestros honorarios.

Claudia Barrero

Socia de Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría